El pasado 17 de noviembre, por fin, después de mucho tiempo sin montarle a los de Renfe un bien merecido «pollo», organizamos con el apoyo del Sindicato Ferroviario de la CGT una parodia ante la estación del Nord de València, lugar emblemático donde se han llevado a cabo las mejores acciones reivindicativas de la historia de nuestro colectivo. Los motivos están reflejados en una entrada anterior, pero básicamente son los de siempre: A los gerentes y directivos de Renfe les importamos un pito los usuarios, las bicis, el futuro del ferrocarril y su único interés es cobrar todos los meses y seguir las directrices de los distintos gobiernos que han primado desde hace decenios el transporte por carretera y los intereses de la industria del automóvil y de la construcción.